Lamine Yamal: nuevo dorsal, mismo fútbol | Fútbol | Deportes

Ni Marcus Rashford ni Joan García. El Barcelona, que andaba de estreno en Son Moix, se lució a partir de la fórmula que lo había consagrado como el mejor equipo de España el curso pasado, campeón de la Liga, de la Copa y de la Supercopa. Es decir, la fórmula de Lamine Yamal, de nuevo acompañado por Raphinha. Con su fútbol, entre los dos comenzaron a abrir un partido que se terminó de romper por las polémicas arbitrales. “Poco que explciar, la gente lo ha visto. Una semana hablando de que el protocolo, si caías al suelo, se paraba el juego. Diez segundos han pasado. Me he mareado un poco. No podía levantarme. No digo que sea culpa del árbitro, pero si el reglamento dice una cosa, hay que cumplirlo”, expuso Raíllo, capitán del Mallorca sobre la acción que terminó en el segundo gol del Barça. “Un poco raro. El árbitro decide no pitar. Nosotros tenemos que jugar”, completó Joan García.

“No me ha gustado el partido. Después de ir 0-2 y las dos rojas, el equipo ha jugado al 50% lo pudimos hacer mucho mejor”, comentó Hansi Flick. Y añadió: “Tenemos que controlar el balón y el juego, pero tenemos que marcar y eso es todo lo que puedo decir. Jugar al 50 o 60% no es posible contra nueve jugadores”. Joan García, por su parte, completó: “Ha sido extraño. Son situaciones del partido. Hemos sabido jugarlo. El portero del Barça, tal y como jugamos, tiene que estar atento a muchas cosas. Pero muy contento”.

Cuando el foco estaba destinado a colocarse en el debut de Joan García y de Rashford, en el despertar de la temporada Lamine Yamal avisó que entre los azulgranas el monopolio del protagonismo es suyo. Y eso que no falló Joan García y que Rashford pudo disfrutar de unos minutos en Mallorca.

A pesar de que la Liga le dio el visto bueno a su inscripción en la madrugada del viernes al sábado, el portero del Barcelona no sufrió por ese retraso. “Estaba tranquilo. Me hubiera gustado hacerlo antes, pero me transmitían mucha confianza desde el club”, comentó el portero. El caso de Rashford era diferente. El equilibrio en el fair play financiero que no se logra conseguir en los despachos del Camp Nou se consiguió con el dinero de Joan Laporta y su Junta —avalaron siete millones de euros— y los movimientos de Deco. El director deportivo pactó la renovación de Koundé para generar espacio en el gasto de la plantilla, como también ideó más movimientos para cumplir con Flick. “Hay que felicitar a Deco con este tema, que como habéis podido ver no es sencillo”, destacó Laporta en la previa del duelo en Mallorca.

Resultó, sin embargo, que la alegría de la inscripción in extremis parecía torcerse. Una mala caída durante los trabajos previos en Son Moix asustó a Joan García, preocupó a la hinchada. El susto duró poco. Unos minutos después, el nuevo portero azulgrana regresó al césped de Son Moix. En el partido no tuvo prácticamente trabajo. Apenas un remate inofensivo de Muriqi que aterrizó en sus manos.

El estreno oficial de Rashford se hizo esperar. Coincidieron en lo discreto: si Joan García apenas se esforzó en su portería, Rashford apenas forzó al portero del Mallorca. Después de apretar a la directiva para que solucionara la inscripción del inglés —con Lewandowski en la enfermería y Ferran sin ritmo de entrenamientos—, Flick quería contar con Rashford en Mallorca. De hecho, en los trabajos previos al desplazamiento a Mallorca, el técnico había probado con el ex del United en el centro del ataque en lugar del lesionado Lewandowski. Si bien, fue suplente de entrada en Mallorca. El técnico apostó por cuidar la autoestima de Ferran.

Flick es tan cuidadoso en la gestión de los minutos —hay excepciones como Lamine—, como también en la gestión de los egos. Y Flick entendió que el premio de la titularidad debía ser para Ferran, menos talentoso, pero más trabajador que Rashford, el curso pasado revulsivo estrella del Barça después de marcar 19 goles en 45 partidos (1.921 minutos).

Y no falló Ferran. Comenzó la temporada con el mismo acierto goleador que cerró el curso pasado. Por supuesto, tampoco falló la dupla que forman Lamine Yamal y Raphinha. El 10 azulgrana no solo asistió al brasileño, sino que forzó la segunda amarilla para Morlanes y cerró el duelo con un golazo con su sello. Se renueva el Barça de Hansi Flick con Joan García y Rashford, pero no cambia. Sigue mandando Lamine Yamal: nuevo dorsal, mismo fútbol.